Si alguna vez escuchaste comentarios o afirmaciones como: “Tu hijo/a no parece autista” o “No es asombroso que tenga contacto visual, ¿Cómo es posible que tenga autismo?”, entonces sabes que existen muchos mitos sobre el autismo. Estos son los mitos más comunes sobre el Trastorno del Espectro Autista (TEA) que he escuchado en mi práctica profesional.
1. Las personas con autismo no quieren hacer/tener amigos.
Si eres padre / madre de un niño con Trastorno del Espectro Autista, entonces sabes que esto no es cierto. Tu hijo/a quiere tener amigos y pasar tiempo con otros, pero lo más probable es que no esté al tanto de las señales y códigos sociales necesarios para entrar en contacto y pasar tiempo jugando con otro niño.
2. Las personas con Trastorno del Espectro Autista (TEA) no sienten emociones.
Las personas con autismo tienen dificultad para expresar sus emociones, particularmente usando el lenguaje verbal. Esto no significa que no sientan emociones, si lo hacen y necesitan de nuestra ayuda para poder expresarlas. Las personas con autismo son capaces de amar y sentir emociones solo que de manera diferente. Esta dificultad puede provocar crisis nerviosas y/u otros comportamientos problemáticos.
3. Las personas con Trastorno del Espectro Autista son muy inteligentes.
Solamente el 5% de las personas con autismo tienen el Síndrome de Savant o genialidad, el cual se caracteriza por tener habilidades extraordinarias relacionadas con la memoria, arte y matemáticas.
4. Con el tiempo, los comportamientos difíciles cambiarán por sí mismos a medida que los niños con Trastorno del Espectro Autista crecen.
Los niños con trastorno del espectro autista necesitan ayuda específica para lidiar con los desafíos de esta condición, por ejemplo: terapia para desarrollar habilidades de habla y comunicación, y apoyo para enfrentar cualquier desafío particular que surja en el hogar, la escuela y el mundo exterior.
5. El Trastorno del Espectro Autista (TEA) lo provocan las madres distantes, frías o ausentes.
Este es uno de los peores mitos sobre el autismo, ya que tantas madres (y padres e hijos) han sufrido a causa de él. Un mito popularizado por el Dr. Bruno Bettelheim en su libro “La fortaleza vacía” (1967), en donde culpa a las llamadas “madres refrigeradoras” por no vincularse con sus hijos al nacer y, por lo tanto, causarles autismo. Su teoría ha sido totalmente desacreditada.
6. Los niños con Trastorno del Espectro Autista (TEA) no pueden aprender.
Lamentablemente, todavía existe la idea que las personas con trastorno del espectro autista son incapaces de aprender. En mi práctica de intervención temprana en niños con Trastorno del Espectro Autista (TEA), he podido ver el progreso de los pequeños /as y me siento muy orgullosa de ellos y sus familias. Esta es una falsa creencia que debemos desacreditar para que más niños puedan recibir una adecuada y oportuna atención, lo cual ayudará a que su pronóstico mejore.
7. Las personas con Trastorno del Espectro Autista (TEA) no son cariñosas.
La estimulación sensorial se procesa de manera diferente en las personas con Trastorno del Espectro Autista (TEA), lo que a veces puede provocar una aversión a ser tocado o estar cerca de los demás. Sin embargo, pueden ser cariñosos como cualquier persona, simplemente tienden a dar y recibir afecto de manera diferente y, por lo tanto, es necesario seguir su ritmo y respetar siempre sus límites.
8. Las personas con Trastorno del Espectro Autista (TEA) odian los ruidos fuertes.
Nuevamente esto se remite a procesar la estimulación sensorial de una manera diferente a otras personas. Algunas personas con autismo son extremadamente aversivas a los ruidos fuertes, mientras que a otras no les molestan en absoluto. Depende del niño /adolescente / adulto (como todos los individuos con autismo).
9. Solo los niños pueden tener Trastorno del Espectro Autista (TEA).
El Trastorno del Espectro Autista es mucho más común en niños que en niñas, y de acuerdo a las estadísticas hay 3 niños diagnosticados por cada niña. Por otro lado, se tiene la falsa idea de que es una condición exclusiva de la infancia, dejando abierta la posibilidad de que desaparezca con los años, lo cual es totalmente falso. Es una condición para toda la vida, lo que va cambiando son las ayudas y/o apoyos que van recibiendo a medida que crecen.
10.Las personas con Trastorno del Espectro Autista (TEA) no pueden hablar.
Las personas con Trastorno del Espectro Autista desarrollan el lenguaje de manera diferente. Mentiríamos si decimos a unos padres que su niño/a con autismo va a hablar y también lo haríamos si les dijéramos que no. Nadie lo puede saber. La intervención temprana en niños con trastorno del espectro autista es crucial. Hablarle a un bebé desde el nacimiento, cantarle, responder a sus balbuceos, etc. ; toda estimulación del lenguaje en estas etapas favorece su desarrollo y hay que intervenir lo más pronto posible para aprovechar el máximo rendimiento de sus habilidades comunicativas.
11. El Trastorno del Espectro Autista (TEA) es provocado por las vacunas, medicamentos o por una mala alimentación durante el embarazo.
Las circunstancias que dan lugar al autismo provienen de varias posibles combinaciones, entre ellas genéticas, metabólicas y ambientales.
Las estadísticas muestran que alrededor de los 18 meses los padres notan los primeros signos de alarma y en promedio a los 4 años se recibe un diagnóstico.
Si faltó algo más en mi lista de mitos sobre el autismo, déjamelo saber en los comentarios.
Aclaración: Recuerda que esta información es para fines educativos y de ninguna manera reemplaza la evaluación realizada por un profesional calificado. Si crees que tu hijo/a presenta retrasos en sus habilidades de comunicación, conversa con su pediatra o busca un fonoaudiólogo para una evaluación.
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