La imitación es una característica de los niños/as y es muy importante para el desarrollo de diferentes aprendizajes.
La imitación es la capacidad de reflejar, repetir y practicar las acciones de otros. La imitación se desarrolla de manera secuencial, comienza con la imitación de objetos y termina con la copia de palabras. Es por eso que ves a tu pequeño/a saludar para indicar "hola" antes de decir la palabra "hola". Pueden imitar las actividades del hogar usando un trapo para limpiar, tratando de poner la mesa, hablando por teléfono o poniéndose los zapatos. Y también pueden imitarte durante el juego, al colocar una pieza de rompecabezas, deslizar un carrito por una rampa, lanzar una pelota, etc.
Ahora veamos cómo progresa con el tiempo la imitación:
#1 Acciones con objetos
Alrededor de los 8 meses de edad, los niños comienzan a imitar gestos familiares como aplaudir, los movimientos que se usan para esconderse o presionar un botón después de ver al adulto hacerlo funcionar. Esto continúa progresando durante los primeros años, tu hijo/a copia algo que te ha visto hacer con un objeto, por ejemplo: golpear un tambor, revolver con una cuchara, poner un bloque en el recipiente, sacar una pieza de un rompecabezas, etc.
#2 Gestos comunicativos
Los gestos son extremadamente importantes para predecir el desarrollo del lenguaje más adelante. Una forma en que los niños aprenden estos gestos es imitándonos. Practica señalar, saludar, sacudir y asentir con la cabeza, dar el pulgar hacia arriba y todos los demás gestos que se te ocurran. Podrían ser grandes movimientos motores como saltar, pisotear y aplaudir.
#3 Vocalizaciones en juego
Estas vocalizaciones, también llamadas sonidos simbólicos, son excelentes para practicar las vocales y los sonidos iniciales. También fomentan la atención conjunta mientras juegan con objetos que le interesan a tu pequeño/a. Estas vocalizaciones las vemos a menudo en los juegos con carritos, con los bloques que se caen y hacen pum!, los sonidos de los animales mientras lees y juegas, etc.
#4 Palabras exclamativas
Estas son secuencias de sílabas divertidas y fáciles de repetir que normalmente no se consideran "palabras verdaderas". Sin embargo, los niños a menudo pueden producir estas palabras antes de otras palabras funcionales como: más, no. Algunas de estas palabras incluyen: mmm, oh no!, uau, yee, yupi y ay.
#5 Discurso automático en rutinas verbales
Esto ocurre cuando tiene las mismas rutinas verbales para la actividad cada vez que la realiza. El niño está familiarizado con “1, 2 y 3”, decir "en sus marcas, listos, ya" cuando juegan con autos o tienen una carrera, etc.
#6 Palabras funcionales
Imitar palabras funcionales le da al niño/a la oportunidad de usar el lenguaje para ganar algo. Cuando los niños están aprendiendo a hablar por primera vez, quieren/necesitan ver el "premio" por su forma de hablar. Comer, beber, un juguete favorito y "más" son palabras funcionales comunes que los niños aprenden a imitar desde el principio.
#7 Frases cortas
Una vez que el niño/a ha aprendido que con el uso de palabras habladas puede obtener lo que quiere, a menudo verá un aumento en el vocabulario. Una excelente manera de continuar ampliando esto es hacer que tu pequeño/a imite frases cortas (2-3 palabras). Combina una palabra que tenga en su vocabulario con una palabra nueva o agrégale a una frase común como hicimos aquí: "adiós a todos".
La imitación es la base de la teoría de la mente. Desempeña un papel crucial en el desarrollo de la empatía, la asunción de roles y ponerse en el lugar de otra persona (Tarshis et al, 2016). Comienza desde arriba y trabaja con tu hijo/a para progresar en cada etapa. A medida que avanzan en cada etapa, verás que aumenta su conciencia de los demás, aumenta la capacidad de ser independiente y comienza a surgir la base de las habilidades de juego con sus compañeros.
Aclaración: Recuerda que esta información es para fines educativos y de ninguna manera reemplaza la evaluación realizada por un profesional calificado. Si crees que tu hijo/a presenta retrasos en sus habilidades de comunicación, conversa con su pediatra o busca un fonoaudiólogo para una evaluación.
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